NATURALEZA INFINITA

Les doy la bienvenida a mi Blog con este articulo, una mirada a mi proceso de Diseño a través de la colección NATURALEZA INFINITA, la primera, y la fiel compañera.


“Formas orgánicas, asimétricas en nuestra infinita naturaleza.  Figuras que desde niña dibujaba “sin levantar el lápiz ni pisar línea” … La magia de la maleabilidad de los metales, me permitió plasmar mi idea de naturaleza infinita.  Joyas elaboradas con un solo hilo de principio a fin, tal cual es nuestro existir; sin interrupciones ni pausas, un solo respiro!”


 

 

Detrás de la definición oficial de la colección “Naturaleza Infinita”, hay una historia de toda la vida.  Desde el colegio recuerdo llenar hojas enteras de mis cuadernos con secuencias de líneas curvas sin fin; bien fuese por distracción, o por simple placer.


Seguramente habrá algunos significados detrás de mi obsesión, pero en mi conciencia nació simplemente como un gusto que se convirtió en hábito, y que, aunque se ha transformado constantemente, nunca ha dejado de estar presente.


En el tiempo de universidad, se reafirmaron en mi conciencia creativa las formas curvas, como un patrón de diseño.

 

Influenciada por el Art Nouveau y el Art Deco, que sin duda de forma no aleatoria me fueron asignadas como temas de investigación, (labor que llevé a cabo con pasión), diseñé familias de objetos enteras llenas de curvas libres, en movimiento.  Siempre había una excusa para volverlas a incluir.


Año y medio antes de finalizar mi carrera decidí entrar a un taller de Diseño conceptual, liderada por uno de mis grandes Maestros  D.I. William Vásquez. Él me hizo ver mas allá de los objetos, me llevó a entender la importancia de tener un concepto detrás de cualquier diseño, y a preguntarme mas allá de una simple tarea de oficio, a transmitir y comunicar a través de ellos. Mi Tesis se llamó “Una mirada a través de la Libertad - La Libertad a través los objetos”, una larga y dedicada investigación (que aún no termina), que sin duda me ayudó en su momento a perderme como diseñadora industrial, pero a iniciar el proceso de reconocerme como persona y mas adelante como profesional.


Como “producto” final, diseñé y elaboré ocho “mascaras” en hilo de alambre doblado, adornados con plumas, flores y otras clases de “accesorios” de la naturaleza, que exhibieron modelos en una pasarela; Objetos bastante atípicos para la ocasión y no propiamente fabricados industrialmente.  Piezas únicas y asimétricas en metal, con una carga conceptual grande, pero enfocadas a un mercado de moda.


Durante mucho tiempo evalué esta investigación como anti-tesis de Diseño industrial; solo años después entendí la formación mental adquirida, me centró en mi proceso como diseñadora, me vinculó con la joyería, los accesorios, la moda…  las grandes pasiones!

 

Desde entonces en los siguientes procesos de formación; aun en las pausas creativas, que a veces fueron mas largas de lo que me hubiese gustado, estaban las curvas infinitas de nuevo en mis bocetos, apuntes, en los libros, en las servilletas… nunca me abandonaron.

 

Luego de 8 años de estar sumergida “literalmente” en el universo de la cultura y el diseño alemán, de estudiar arquitectura de interiores, hacer mis primeros trabajos en retail de moda de lujo, (mil cosas distintas por las que no podía decidirme completamente), volví a Colombia desorientada y sin mucha idea de saber que hacer.  


Meses después, a comienzos del 2007, influenciada por mi mamá, quien ya venía haciendo joyería y bisutería un tiempo, inicié clases de Joyería en la escuela de joyería de Francisco Piñeros.  Sus enseñanzas me abrieron las puertas del universo de los metales, las primeras bases, la técnica… las herramientas para expresarse en este infinito mundo de posibilidades.


Para uno de los primeros ejercicios realizados en la técnica que el profesor denominaba “falsa filigrana”, diseñé el primer anillo de naturaleza infinita.  La oportunidad para dejar fluir las curvas había llegado.



Plasmé por primera vez una secuencia de línea curva de principio a fin en hilo de plata, y vendí algunos ejemplares.   Sin embargo, en ese momento aun no estaba lista para dedicarme 100 % al oficio. Decidí trabajar de nuevo en retail; tuve un lindo trabajo que me enseñó muchas otras cosas durante años, pero nunca dejé de diseñar joyas. Hacías pequeñas colecciones, que por falta de tiempo quedaban en manos de las mujeres de mi familia, de amigas cercanas o en las mías propias.  Solo hasta después de culminar este trabajo, y de un maravilloso viaje en 2015, decidí iniciar a explorar el mundo que hoy feliz habito.


“Naturaleza Infinita” renació de inmediato y comenzó a transformarse; cambió los calibres, la forma del material base para entretejer, extendió sus posibilidades, surgió en otros colores, y desde entonces no ha parado nunca de evolucionar. Es una de las colecciones mas vendidas, mas apreciadas. No se opaca ante las otras colecciones, pareciera tener alma propia. No me abandona.

 

La analogía con la vida misma de esta colección, fue una interpretación de una clienta.  Ella entendió el sin fin de la línea como la vida misma, con altibajos y recovecos, sin pausas, ni interrupciones; un solo respiro, una línea continua de principio a fin.


Encontré fascinante su descripción. Puso en palabras lo que yo solo podía expresar con líneas… y desde entonces, adopté este concepto con su permiso, como propia.


Cada pieza de esa colección se elabora con un solo hilo.  Cada clienta que la porta una joya de “naturaleza Infinita” luce su propia vida con orgullo y elegancia, acepta su recorrido tal cual es.

 

Luego de estos muchos años encontrando el camino, 5 de dedicación completa a este oficio, solo puedo agradecerle… la autentica “Naturaleza Infinita” está en mis manos.


Conoce la colección NATURALEZA INFINITA aquí


 

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